La hipoacusia es un problema cada vez más presente en nuestra sociedad por múltiples causas. La situación más preocupante y que tiene más consecuencias es cuando afecta a niños pequeños o recién nacidos. En estos casos la ciencia y la tecnología han avanzado de una forma contundente y en la actualidad la sordera profunda y severa tienen soluciones que pueden ayudar a los recién nacidos.
Hoy en día ya no deberían existir casos de sordomudez o bien estos deberían ser excepcionales. Con la aparición de los implantes cocleares la sordera en recién nacidos, lactantes y en general niños ha sufrido una revolución; ahora ya hemos comprobado que cuando un niño con sordera profunda es sometido a un implante coclear antes de los dos años de edad será capaz de desarrollar un lenguaje normal en un periodo dos tres años.
Hoy consideramos que todos los niños con sordera profunda bilateral deben ser implantados bilateralmente y a ser posible en el mismo acto quirúrgico para conseguir lo más rápidamente posible la adquisición de un lenguaje hablado como los normo-oyentes. Las publicaciones científicas más recientes así lo demuestra y la norma a nivel internacional es la implantación bilateral siempre que no existan determinantes económicos que lo impidan. El desarrollo del cerebro exige que la información auditiva llegue a la corteza cerebral al mismo tiempo y cuanto antes para poder desarrollar la plasticidad cerebral y evitar el periodo crítico fuera del cual el desarrollo del lenguaje se ralentiza o no va a desarrollarse.
Esta situación que ha supuesto una revolución en el mundo de la sordera se basa en la tecnología y en el trabajo desarrollado por logopedas y audioprotesistas que van a apoyar a estos niños y a sus familias. El trabajo de habilitación de un lenguaje en estos niños es fundamental una vez que han sido implantados. Este trabajo no puede ser desarrollado por cualquiera sino por logopedas entrenados y especializados, se trata de una formación que lleva tiempo y dedicación.
En el Centro Otoneurológico contamos con un equipo de logopedas y audioprotesistas con la experiencia y dedicación para ayudar a estos niños y a sus familias a superar esta situación y a conseguir que estos niños desarrollen un lenguaje como los normo-oyentes y a su integración en escolar.
Doctor Jaime Marco Algarra, Catedrático de Otorrinolaringología.